Con este y otros ridiculos articulos que La Nacion permite y avala en temas tan BASICOS para una sociedad, para una cultura, desde un medio donde sin dudas como todos apuesta por una propuesta, se nota que ya estan siendo contaminados porla cultrua donde viven con codigos y valores socialistas aberrantes. Una lastima La Nacion. Comparto el articulo y ciertoscomentarios de ciudadanos comunes mascuerdos e inteligentes que el autor.
Los dueños de la palabra - 08.07.2010 - lanacion.com
Aqui los comentarios.
alvaro_feuerman
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Curiosamente, quienes más han deformado deliberadamente el lenguaje, han sido los socialistas. Como en la novela de Orwell, 1984, en la cual hay un "Ministerio del Amor", que esparce su odio en forma institucional. En España hay actualmente un "Ministerio de la Igualdad". Palabras como "discriminación", "represión", "dictadura", hoy tienen significados muy distintos que hace 30 años. También la palabra "social" ha sido totalmente trastocada en el último siglo: "paz social" significa que el capo del sindicato de turno ya ha sido coimeado y nos dejará en paz; "justicia social" significa lo opuesto a la justicia, es decir, en lugar de dar a cada uno los suyo, es dar a alguien lo que no lo corresponde, que un tercero deberá solventar. "Contribuyente" es el pobre tipo que paga todos sus impuestos; "gran contribuyente" aquel que ya no puede zafar. "Derechos humanos" nos sugiere la idea de que existen algunos derechos que no aplican a los humanos (¿cuáles serían?). Son sólo algunos ejemplos.
juanjo71
Convendría releer el "Cratilo" de Platón... El "onomaturgo" fija las palabras de acuerdo a la naturaleza de las cosas, no es caprichoso o arbitrario. El nombre "matrimonio" se le aplica a una realidad determinada; si hay realidades diferentes, les corresponden nombres diferentes.
Kafka40
Disolvamos las cámaras... para qué legislar... creemos una comisión de linguistas notables y rijámonos por el Diccionario de la RAE... ¡qué ridiculez este artículo!
Bidasoa
Pues me parece que las palabras tienen un significado, asi un zapato, siempre será un zapato por mucho que lo cambie la moda, nunca será una zapatilla. La palabras, tienen significado, raiz, etimología. Es curioso que no lo note una "escritora". Y la palabra matrimonio, viene de madre.Y la definición es: la unión de un hombre y una mujer...Hoy en día es común hablar de mi pareja, cada vez son menos los que se casan. Pareja, no especifica, sexos...Parecería una capricho, desde mi punto de vista, empecinarse en usar la palabra matrimonio, aún cuando la unión civil, que de eso se trata, conlleve los mismos derechos.
brendance
mmmm...eso de que porque sos gay sos culto, amás más profundamente...por favor! ademas no se modifica el contenido de las palabras, se crean nuevas denominaciones, por ej "unión" y "civil". Ademas la RAE no le va a dar la razón porque define ley de una forma bastante distinta a como la define el autor.
alvaro_feuerman
Recuerdo un cura que dijo una vez en la homilía: "¡Milanesas son de ternera!... ¡como mucho de pollo!... ¿pero qué es ésto de milanesas de soja?" ¡Jajaja! Siempre lo recuerdo porque me pareció muy bueno, y representa el pensar y sentir de mucha gente. Es cierto que todo cambia, y muy especialmente el significado de las palabras. "Discriminar" en el sentido actual, con connotaciones negativas, es una palabra bastante nueva. Lo mismo "reprimir". Cuando yo era chico y comencé a escuchar que la policía "reprimía" a la gente, pensaba: "¿De qué están hablando estos tipos? ¿A quién reprimen? ¿Qué pasó?"... Bueno, con el tiempo quizás Claudia Piñeiro tenga razón y cuando veamos dos bicicletas apoyadas en la vereda digamos: "es un matrimonio de bicicletas"; quizás un tipo que tiene plantas en su jardín sea "un matrimonio del tipo con las plantas"; quizás al ver pasar al paseador de perros, le digamos a nuestros hijos: "a ver chicos, dejen pasar a los matrimonios...";Y, por qué no, mejor dejo de escribir pavadas y me voy a tomar un "matrimonio de vinos". Pásenla bien.
felix6
RAE: Matrimonio, primera acepción.” m. Unión de hombre y mujer concertada mediante determinados ritos o formalidades legales”. Con todo respeto le pregunto a la autora de la nota: Quién quiere realmente adueñarse de la palabra matrimonio. Además el artículo está plagado de contradicciones, que me animo a definirlas como infantiles. Por ejemplo donde señala que el trabajo de la RAE es “tomar las palabras que todos usamos y definirlas, decir qué significan, qué nombran, y tomar los cambios que los usos y costumbres van imprimiendo en ellas”, Puede aclarar la autora si existe uso y costumbres que hayan modificado el significado del término matrimonio salvo los ataques que no han hecho mella en su prístino significado. También cuando afirma que “como usted sabe, las palabras nombran la realidad, nombran todo lo que existe, sea tangible como una mesa o intangible como un sueño. Estamos de acuerdo. Donde está el problema. Repito, quién quiere adueñarse de término matrimonio
nauticus
Señora Piñeiro, usted jamás comprendió el eje del asunto. Primero le aclaro que la Real Academia Española funciona (en esencia, aunque no únicamente) como un "notario" de la lengua, es decir, recoge el uso que le dan a las palabras los diversos pueblos hispanoparlantes. En ese sentido, los hispanoparlantes en conjunto somos los dueños de las palabras. Lo que usted es incapaz de ver, es que el debate que se está librando en estos momentos no es lingüístico sino ideológico. Se está buscando IMPONER mediante una ley una determinada postura moral e ideológica, a saber, que la relación entre un hombre y una mujer que se unen de manera perpetua y exclusiva, con el fin de tener descendencia (Matrimonio), no tiene mas valor, ni es mas importante, ni más beneficiosa para la sociedad, que cualquier otro tipo de relación afectiva, al concederles los mismos privilegios y denominándolas con la misma palabra. Y no por voluntad de un pueblo, sino de una minoría apoyada por el establishment político.
nauticus El Matrimonio es mucho mas que un contrato civil, ya había parejas entre un hombre y una mujer que se unían con el fin de tener descendencia mucho antes de que hubiera estados (y si hoy existe algo a lo que podamos llamar civilización, es gracias a eso). Los Estados decidieron privilegiar esta realidad y darle un marco jurídico, en pos del bien común. ¿Que bien común? El bienestar de las futuras generaciones. Eso de que es un fin social "la protección de la pareja" es una verdad a medias, el fin primario y fundamental de los privilegios otorgados al matrimonio civil es el bienestar de los hijos. Solamente un necio puede negar que la familia es el fundamento de la sociedad, y que el Matrimonio (el de verdad, perpetuo y con el fin de procrear) es el fundamento auténtico de una familia. Pretender alterar esos fundamentos es procurar el MAL común.
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